John Saxon murió a fines del mes pasado. El actor neoyorquino, figura legendaria en el cine de terror y artes marciales, así como en diversas vertientes del cine de explotación, participó en varias películas de culto, que merecen ser vistas más allá de títulos populares como Pesadilla en Elm Street u Operación dragón.
Por Nicolás Carrasco ESPECIALES / JOHN SAXON
Fuente: FLICKFEAST
Aún recuerdo la tristeza que sentí al enterarme de los fallecimientos de George Hilton y de Sid Haig el año pasado. En el 2020 nos han dejado, además, Dick Miller, Dyanne Thorne, Jo Shishido y José Mojica Marins. Con sus partidas, poco a poco, nos deja una parte fundamental de la historia del cine, y de mi relación personal con ésta. A pesar de ser todos ellos de distintas partes del mundo, en mi memoria tienen en común el haber formado parte, como actores y realizadores, de la nueva vida que tuvo el cine de género a partir de 1960, en los Estados Unidos, Sudamérica, Europa y Asia, aparte de las banderas que se alzaron en otros territorios como Australia y Canadá. Es un fuego que ardió poco más de dos décadas en estudios como Nikkatsu, American International Pictures o la New World Pictures, así como en centenares de esfuerzos independientes. Dos décadas, los sesenta y los setenta, cubrieron la vida breve que tuvieron subgéneros como el euro-western, el giallo, el Nikkatsu action, el blaxploitation o el terror gótico.
John Saxon fue, para mí, una de esas tantas estrellas. Un axioma del cine, para decirlo en términos de Michel Mourlet, quien se refirió de esa manera a Charlton Heston en Cahiers du Cinéma. Nacido en Brooklyn, Nueva York, en 1936, Saxon apareció en más de 200 películas, en un periodo de seis décadas. Menciono unas pocas: Queen of Blood (1966), Fast Company (1979) –dirigida por David Cronenberg-, Beyond Evil (1980), Batalla más allá de las estrellas (Battle Beyond the Stars, 1980) y Hellmaster (1992). Para objetivos del presente texto, recomendaré cinco películas no tan populares como Pesadilla en Elm Street (A Nightmare on Elm Street, 1984) u Operación dragón (Enter the Dragon, 1973). Que esta breve lista sirva como una buena introducción.
Noche del demonio (La ragazza che sapeva troppo. Mario Bava, 1963)
Luego de una larga carrera como director de fotografía y artista de efectos especiales, así como de dos películas en las que compartió la dirección con Riccardo Freda, Mario Bava estrena en 1960 su ópera prima en solitario, La máscara del demonio (La maschera del demonio), con la que marca un antes y un después en la historia del cine fantástico, y da inicio a una edad de oro del cine de género en Italia, que dura aproximadamente tres décadas.
Noche del demonio, su cuarto largometraje, puede considerarse el primer giallo, respuesta italiana tanto a Agatha Christie como a Alfred Hitchcock (a quien el título original del filme ya evoca con un guiño), que combina elementos del thriller, del whodunnit y, a veces, del terror fantástico. La película trata de una joven estadounidense llamada Nora, quien visita Roma por una herencia. Allí es testigo de un asesinato, y la policía no encuentra el cadáver ni rastros del crimen. El Dr. Bassi (John Saxon) la acompaña en las investigaciones.
Residencia macabra (Black Christmas. Bob Clark, 1974)
Tercera película de terror de Bob Clark, luego de Children Shouldn’t Play with Dead Things (1972) y Deathdream (1974). Producción canadiense, la cinta sigue a una fraternidad de mujeres que reciben una serie de llamadas obscenas y amenazantes. Algunas, son asesinadas por un psicópata en la noche de Navidad. Título muy influyente, puede considerarse como el primer slasher, e inspira directamente a la película que desataría la explosión del subgénero cuatro años después: Halloween de John Carpenter. Saxon interpreta al teniente de policía encargado del caso y del rastreo de las llamadas.
La ley del Magnum (Blazing Magnum / Strange Shadows in an Empty Room. Alberto De Martino, 1976)
Es una extraña mezcla de thriller de acción con whodunnit, influenciada por Harry el sucio (Dirty Harry, 1971) y las primeras películas de Dario Argento. Se filmó en Canadá y es protagonizada por Stuart Whitman y Martin Landau. El primero interpreta a un detective fascista que debe descubrir al asesino de su hermana. John Saxon encarna al detective que acompaña a Whitman en la investigación. En Estados Unidos, se trató de vender la película como un slasher o como un giallo, lo que fue una práctica común con los policiales europeos de la época.
Cannibal Apocalypse (Antonio Margheriti, 1980)
IMPORTANTE: se advierte que este tráiler puede herir la susceptibilidad de algunos lectores.
En pleno apogeo del cine de caníbales italiano (ese mismo año verán la luz Eaten Alive! –Mangiati vivi!- de Umberto Lenzi y la cumbre del subgénero, Caníbal Holocausto -Cannibal Holocaust- de Ruggero Deodato), Antonio Margheriti ambienta su filme no en la Amazonía sino en Atlanta. El título original en italiano es Apocalypse Domani, que traducido al castellano sería “Apocalipsis mañana”, en obvia referencia al filme de Coppola estrenado el año anterior. Esta sería, además, la primera película de Margheriti sobre el conflicto en Vietnam, a la que seguirían The Last Hunter (1980, cuyo título hace referencia esta vez a una famosa cinta de Michael Cimino) y Tiger Joe (1982).
La película cuenta la historia de Norman Hopper (Saxon), un veterano de Vietnam que durante el conflicto fue mordido por otro soldado, a quien la guerra, la tortura y el hambre convirtieron en un caníbal. En los Estados Unidos, su vida doméstica es puesta de cabeza por el regreso de ese soldado, quien despierta en él un deseo por consumir carne humana.
Tenebre (Dario Argento, 1982)
Tenebre cuenta la historia de un novelista norteamericano que promociona en Roma su más reciente obra de misterio, y se ve involucrado en la búsqueda de un asesino en serie que parece haberse inspirado en sus historias. John Saxon interpreta a su agente.
Es un giallo fundamental de Dario Argento, quien fuera el responsable de darle una nueva vida al género en 1970 con su ópera prima El pájaro de las plumas de cristal (L'uccello dalle piume di cristallo). Luego de las incursiones en el terror sobrenatural con Suspiria (1977) e Inferno (1980), Tenebre fue el regreso triunfal del italiano al género que había ayudado a popularizar.
Comentarios